No creo que a nadie le sorprenda que diga que disfruto estar con mi hijo.

Puede que tengan 28 y 30 años y estén casados, puede que vivan al otro lado del país y del mundo, pero valoro mucho el tiempo que paso con ellos.

A medida que mi demencia avanza, admito que pienso en mis dos hijos como si fueran uno y el mismo. Pero, sea cual sea el que me llame, sé que es mi hijo y soy feliz. Mi hijo mayor ha vivido históricamente mucho más cerca y hasta que se mudó a China el año pasado, lo veíamos con mucha frecuencia. E incluso cuando regresa de China de visita, lo veo a menudo, y eso me da una gran alegría.

Sin embargo, para sentar las bases de esta historia, es importante saber que mi esposa y yo sacamos a pasear a nuestro perro todas las mañanas. Es algo que tanto ella como el perro disfrutan, pero es algo que debo decir que solo aguanto. Van demasiado lejos, por un lado, y caminan demasiado rápido. Y se detienen constantemente porque el perro necesita hacer sus necesidades. No me malinterpreten, amo mucho a mi perro; pero debo admitir que no me gusta mucho salir a caminar con él…

Sin embargo, cuando mi hijo está en casa, sea cual sea, me lleva a caminar por la mañana. No camina demasiado lejos ni demasiado rápido, sabe hablar un poco y escuchar mucho, es el compañero de caminata perfecto. Siempre me duele un poco el corazón cuando se va, y una de mis mayores preocupaciones es, ¿con quién caminaré? De alguna manera, después de caminar con él, la idea de salir con mi esposa y el perro me deja un sabor amargo en la boca. De hecho, ¡estoy dispuesto a esperar todo el tiempo que sea necesario para caminar con él! ¡Incluso si son meses! No estoy completamente seguro de por qué mi esposa no está de acuerdo con esto…

Esto me recuerda nuestro caminar cristiano. En este mundo, podemos elegir caminar con muchas influencias diferentes. Podemos elegir caminar bajo la influencia de la televisión o las películas. Podemos elegir caminar bajo la influencia de la multitud popular. ¡Podemos elegir caminar completamente solos! Pero solo hay Uno que nos hará el “compañero de caminata” perfecto: Dios mismo.

Colosenses 2:6 nos dice: “Por tanto, de la manera que recibieron a Cristo Jesús el Señor, así anden en él…” (RVR1960).

¿Qué significa caminar con Dios? Quiero decir, sé cómo caminar con mi hijo, ¡pero Dios no es tangible!

La Biblia nos da mucha orientación para esto. Vea estos versículos:

a) “Lámpara es a mis pies tu palabra, lumbrera a mi camino” (Salmos 119:105 NVI). Cuando nos adentramos en la Palabra de Dios, comenzamos a aplicarla a nuestras vidas, y a medida que la aplicamos, nuestro camino se vuelve más claro.

b) “Bienaventurados los de camino perfecto, los que andan conforme a la ley del Señor. Bienaventurados los que guardan sus estatutos y lo buscan con todo el corazón. No hacen nada malo, andan en sus caminos” (Salmos 119:1 NVI). Tenga en cuenta que en los días del antiguo Israel, la “Palabra de Dios” era la ley y los profetas. Por lo tanto, caminar de acuerdo con la ley de Dios ES caminar en la Palabra de Dios.

c) “Acérquense a Dios, y él se acercará a ustedes. Lavaos las manos, pecadores; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones” (Santiago 4:8 NVI). En otras palabras, si queremos que Dios se acerque a nosotros, ¡debemos acercarnos a Él purificando nuestros corazones!

Otra forma de caminar con Dios es dejar que Él lleve nuestras cargas:

“Echa sobre el Señor tus preocupaciones, y él te sustentará; no dejará jamás que el justo tambalee” (Salmos 55:22 NVI)

¡No necesitamos caminar solos! Tenemos a Dios que no solo está dispuesto a llevar nuestras cargas, quiere acompañarnos en nuestro caminar con Él, ¡sino que lo ordena!

Nadie puede caminar conmigo como mi hijo. De la misma manera, nadie puede acompañarte en tu caminar por la vida como Dios mismo. No te preocupes por ser popular. No te preocupes por ser una carga para la gente. No dejes que cosas como la televisión y los videojuegos te influyan. ¡Dáselo a Jesús! ¡Entra en Su Palabra! ¡Deja que esa sea la luz que ilumine tu camino! ¡Camina con Dios!

Inspirado por Rob Chaffart
Fundador, Ministerio Answers2Prayer

Traducido por Pascal Lambert.